¿Un equipo que quiere "encanastar" ?...Mal empezamos...

Por alguna extraña razón últimamente he sentido la necesidad de volver a escribir. Suena a frase de escritor de best seller, como si yo fuera escritor de vocación o hubiese vendido millones de ediciones de novelas o historias interesantes. No es el caso. Pero como no sé cantar, no cuento mi vida en las redes sociales o no suelo contarla, me he acordado de que una vez cree un Blog para escribir sobre lo que me diera la gana, ya fuese importante o no, con el objetivo de desahogarme en ciertos temas personales, deportivos, culturales o metafísicos. (ja! estoy flipao). Mi inicio de temporada tras un nuevo verano lleno de buenos momentos y también de situaciones extrañas está transcurriendo muy ligado al baloncesto. El 30 de agosto, mi amigo Moisés Navarro me ofrecía entrenar a un equipo Preinfantil Masculino (niños de 12 años) con experiencia 0 en baloncesto federado. La oferta era buena y las ganas de poder experimentar qué se siente dirigiendo a un equipo me hicieron plantearme muy enserio la propuesta. Tras mi partida de Salesianos por motivos deportivos, personales y como yo les llamo "de memoria histórica" estaba dispuesto a dejarme el baloncesto. Con la de años que estuve deseando estar ahí pensaba que este año iba a ser sabático, sin jugar y sin ayudar a ningún equipo como entrenador. A veces los principios, la integridad o lo que te corre por las venas te impide estar donde quieres o donde te gustaría estar siempre. Sin buscar culpables ni guerras, uno decide su futuro sopesando muchas cosas, sobre todo personales y familiares, y fíjate por donde he acabado más vinculado al basket que nunca. Un nuevo proyecto, CB Estudiantes Cartagena, y el amigo Moisés no me dejó ni decirle que sí, me dio un fin de semana para pensar si aceptar su propuesta y al día siguiente ya tenía el listado de jugadores con los que empezaría a entrenar solo 3 días después. Quien me conoce sabe que no soy muy niñero, que si destaco por algo es por defender la razón, la responsabilidad, la tranquilidad...y exigir eso a 12 "salvajes" que nunca han estado en una pista con un "jefe" es prácticamente una utopía. Llego a casa reventado de pegar gritos, me enfado 101 veces en cada entrenamiento pero no soy un superhombre, y tengo que reconocer que ya me estoy llevando mis pequeñas alegrías, que igual que me agotan también me llenan de vitalidad sus ganas, sus miedos, su aprendizaje y su proceso de madurez tanto personal como deportiva que acaba de empezar y en unos meses sufrirá grandes cambios. Independientemente de los resultados y de mi inexperiencia como entrenador, es genial sentir el respeto y la admiración de unos "mocosos", y mucho más cuando partiendo de cero, vas comprobando avances en todos ellos, a distintas velocidades, llevándote sorpresas a cada minuto. Al ritmo que voy, estaréis pensando lo mismo que yo, que me estoy convirtiendo en una "madre" y que despediré la temporada llorando porque los querré y los echaré de menos. Pues no vais muy desencaminados. Hablaré de sus partidos, de anécdotas, de cosas que vayan pasando durante la temporada...y por supuesto, de nuestra primera victoria que, sin duda, intentaremos conseguir durante todo el año.

Como jugador, hemos formado un buen equipo que se entiende tanto dentro de la pista como fuera. Muchos nos conocemos varios años ya y aunque nos ha costado arrancar estamos pillando el truco a la competición. La 2ª este año es jodida y ya nos hemos encontrado varios "cabrones" de nivel que nos han puesto a correr. A nivel personal, es un año duro, demasiado basket para mi cabeza y para mis piernas, está caro jugar pero todo es más fácil cuando juegas con amigos y para amigos. El grupo tiene un objetivo claro pero no hablamos mucho de ello y eso es bueno. Vamos entendiendo eso que se dice en los periódicos, el topicazo de "ir partido a partido", "hacer piña", "sacar los partidos por lo civil o lo criminal", "no hay enemigo pequeño"...Puede ser un año muy bonito y el inicio es esperanzador, hay mucho potencial y lo mejor esperemos que esté por llegar. Siempre me había imaginado jugando de rojo hasta que me retirase o me retirasen, pero lo de ir de naranja y negro tampoco me está sentando mal. El germen del espíritu Butanito está empezando a crearse y esperemos que nos lleve a lo más alto. Tendréis noticias también... Después de tanto tiempo parado, el blog dice que no puede con tanto peso...asi que cierro esta entrada, a pesar de que tengo muuuuuuuuuuchas más cosas que decir, pero son menos intrascendentes y absurdas y necesitan de más tiempo de reposo y análisis... Un abrazo y mucha ¡POTENCIA!